jueves, 26 de septiembre de 2013

Materiales PCP: ¿Quién soy?

Muchos de los profesionales que trabajan con personas con discapacidad intelectual han oído, leído, se han formado o utilizan una herramienta, ya comentada en el blog, conocida como Planificación Centrada en la Persona. El proceso general de PCP se puede sintetizar en los pasos reflejados en la imagen:


Partiendo de esta base, a lo largo de esta y posteriores entradas, incluiré fichas de trabajo que puedan orientar el trabajo con las personas con discapacidad, convenientemente adaptadas a las cualidades de la persona (utilizar textos, imágenes, fotografías…).

¿QUIÉN SOY?

MI HISTORIA
Primer paso de la PCP. Nos permite conocer mejor a la persona, además de favorecer su propio autoconocimiento. Nos puede dar pistas sobre acontecimientos importantes durante su vida (que, además, nos orientan sobre el estado actual de la persona). Se pueden incluir aspectos básicos como edad, lugar de nacimiento, centros en los que ha estado…  Se trata, básicamente, de hacer un repaso a su historia personal. Por otra parte, es una buena manera de situarlo como protagonista de su propia vida (Eres una persona única, con una historia única y quiero conocerla).




MIS LUGARES
Responde a la cuestión ¿dónde me muevo? Refleja los lugares en los que habitualmente se maneja la persona con discapacidad. Además de establecer la principales áreas para plantear objetivos en cada una de ellas, ayudará a la persona a ser consciente de su presencia en diferentes ámbitos (escolar, ocio, familiar, etc.).



MIS APOYOS
Se trata de definir el círculo de apoyo de la persona con discapacidad, tanto  a nivel formal como informal (teniendo cabida todo el mundo, por ejemplo, el chófer del autobús).  Los círculos concéntricos sirven para colocar a las personas según su mayor o menor presencia, o mayor o menor importancia para la persona (los más importantes, los más cercanos). Se pueden añadir los espacios que se quiera (por ejemplo, equipo de atletismo, grupo de baile…) También aquí se pueden utilizar fotos, algo que quizá hará más atractivo la elaboración de la ficha. A la vez, ir hablando sobre qué apoyo presta cada persona y por qué son importantes para la persona con discapacidad. A medida que se avance en el proceso de PCP, se pueden definir de manera más específica los roles.



Más sobre PCP
Recursos para la autodeterminación

Para descargar fichas 
Perfil Araceli Slideshare (o aarellanotorres@gmail.com) 



domingo, 22 de septiembre de 2013

Claves sobre la #resiliencia


Uno de los objetivos de este blog es transmitir una visión realista y positiva acerca de las personas con discapacidad y de sus familias. De ahí que, en varias ocasiones, haya hablado sobre la resiliencia… 











Además de la información ya vista, existen algunas ideas clave para comprender el sentido de la resiliencia y cómo lo adaptamos a las familias de personas con discapacidad.  Son pilares básicos sobre la RESILIENCIA FAMILIAR:

- Hace unas décadas, la presencia de un niño con discapacidad en la familia era descrito como un acontecimiento catastrófico. Hoy vemos que, además del estrés y los retos adicionales que supone esta situación, son frecuentes también las percepciones positivas por parte de las familias.

- Son muchos y  muy variados los factores, personales y del entorno, que median en el impacto de la discapacidad en la familia. Algunas variables que protegen a las familias del posible impacto negativo son: la existencia de redes sociales, una aproximación positiva a las dificultades, la disponibilidad de información suficiente y adecuada, la buena relación con los profesionales, la cohesión familiar…

-Por otra parte, determinados factores asociados a niveles de bienestar más bajo son, entre otros: problemas de conducta de la persona con discapacidad, dificultades de comunicación y falta de progreso. Dichas variables influyen más en la calidad de vida que la propia discapacidad.

- Los niveles de estrés varían según etapas y circunstancias. Y dado que no son estables, no se puede prejuzgar a las familias o dar por supuesto que conocemos, siempre, cómo se sienten.

- La imagen de la discapacidad que prevalece en el contexto social ejerce una poderosa influencia en el bienestar tanto de la persona con discapacidad como de su familia. La evolución desde una perspectiva catastrofista a una más realista y positiva parece, en parte, consecuencia de los cambios en dicha imagen (eliminación de tabúes y prejuicios, mayor visibilidad, etc.).

- Las familias resilientes son aquellas que, sin negar el estrés, son capaces de afrontarlo. Por lo tanto, no se trata de hacer oídos sordos a las demandas adicionales que genera la discapacidad, ni a los posibles efectos negativos que puede tener, sino de buscar nuevas formas de hacerles frente, sin hipotecar el bienestar de toda la familia. 

martes, 17 de septiembre de 2013

¿Por qué rechazamos a las personas con discapacidad?


Son muchos los motivos históricos, sociales, personales, psicológicos… que están en el origen de la discriminación y de la indiferencia hacia las personas con discapacidad. Cada uno de ellos requeriría un análisis detenido, más allá de un breve post como este. Sin embargo, mencionaré algunas razones que nos ayuden a entender la pregunta que da título a esta entrada ¿Por qué no nos gustan las personas con discapacidad?

1. La sociedad actual valora a las personas, sobre todo, por su capacidad para rendir y por su productividad. La clave del éxito parece residir en ser competente socialmente y, ante todo, económicamente. No hay lugar, ni tiempo, ni espacios, para personas que van más lentas, que requieren más apoyos o que no aportan "resultados" visibles.

2. Por otra parte, nos movemos en un contexto que pone excesivo énfasis en la apariencia, el cuerpo, la belleza física, la juventud… Estándares sociales como estos son muy estresantes, más aún para personas que se salen de la norma y que son consideradas “atípicas”.

3. Seguimos arrastrando ciertas creencias que históricamente han tenido mucho peso y según las cuales asociamos la discapacidad a un mundo negativo, minoritario, marginal, oscuro, triste

4. Como consecuencia, la persona con discapacidad sigue pareciéndonos alguien que sufre permanentemente y que, además, lleva un gran tristeza a su alrededor. Por otra parte, el efecto halo hace que generalicemos aspectos relacionados con la discapacidad a otras cualidades y ámbitos (por ejemplo, pensar que una persona que va en silla de ruedas, es una persona que tiene una discapacidad intelectual…). 

5. Además, la falta de conocimiento, de información, el poco contacto con el mundo de la discapacidad, la falta de empatía, y la exposición a situaciones novedosas, provoca con frecuencia ansiedad y miedo. Miedo a no comprender a la persona con discapacidad, a ofenderle, a que sea agresiva, a no saber cómo tratarla, etc.

Estas razones, entre otras, explican por qué, todavía, muchas personas no están preparadas emocionalmente para tratar y convivir con otros con discapacidad. Y, a pesar de los avances, todavía queda mucho trabajo para decir adiós a actitudes negativas como las mencionadas y abrir paso a la inclusión. 


Autor: Jose Antonio Morena Ramos

Autor: Sergio Grispello

Autor: Sergio Soriano



(Todas las fotografías tomadas del Concurso de Fotografía del INICO, Edición 2012)


lunes, 9 de septiembre de 2013

Principios para la inclusión


En uno de los muchos espacios que existen con materiales y recursos acerca de la discapacidad, aparece un documento sobre principios necesarios para  crear inclusión (visitar su página aquí). Reproduzco aquí alguno de dichos principios, ampliando la información con comentarios adicionales.


  1. Las personas con discapacidad no son sus diagnósticos. De ahí que primero hablemos de la persona (Juan, Sara, Enrique…) y después de su discapacidad (con discapacidad motora, con discapacidad intelectual). Es lo que se llama el lenguaje y filosofía de People First.
  2. El problema no es la discapacidad, los problemas más importantes surgen de las actitudes y acciones de las personas ante la discapacidad. Los juicios negativos, la segregación, la falta de apoyos, de oportunidades…  tienen un impacto mayor en la calidad de vida que las propias dificultades derivadas de la discapacidad. 
  3. Igual que el género, la procedencia… la discapacidad es una característica natural del ser humano. Discapacidad hubo, hay y habrá y, además, nadie está exento de ella.
  4. Las personas con discapacidad son más iguales, que diferentes, del resto de personas sin discapacidad. ¿Por qué no fijarnos en lo que nos une en vez de en lo que nos aleja? 
  5. Todas las personas tienen cualidades y talentos. Así es, incluso las personas con discapacidades más severas. Deberíamos concentrarnos en cómo compensar sus dificultades y reforzar sus cualidades.
  6.  La mayoría de las necesidades de las personas con discapacidad, y de sus familias, pueden ser atendidas desde entornos naturales de apoyo. Las personas con discapacidad deben participar en contextos ordinarios, que les presten los apoyos necesarios. Las prestaciones deben fomentar la autonomía y la inclusión, y no la dependencia y la segregación.
  7.  Las comunidades están preparadas para apoyar a las personas con discapacidad y las personas con discapacidad están preparadas para estar en sus comunidades. Las utopías, poco a poco, van convirtiéndose en realidad. Y seguirán haciéndolo. 
(Puedes descargar el documento original y el adaptado en la página de Slideshare http://es.slideshare.net/  de Araceli Arellano). 


Artículo original: Beliefs necessary to Achieve Community Inclusion
Autora: Kathie Snow
Fuente: http://www.disabilityisnatural.com/