La autodeterminación es una meta que
requiere (a) crear una serie de condiciones en el entorno de la persona con
discapacidad y (b) trabajar competencias y habilidades específicas con la
propia persona. Los grupos de autogestores son uno de
los mejores medios para trabajar este tema, recordando siempre que las
protagonistas son las personas con discapacidad intelectual y que el
profesional es un mediador o facilitador del aprendizaje. Estos espacios son perfectos para que
las personas adquieran y ejerciten habilidades de autodeterminación, que luego
deberán transferir a otros contextos y momentos. Una de las actividades que se puede
realizar es valorar y reflexionar sobre el grado de autodeterminación personal
en diversas áreas de la vida. Pensar en el tipo y cantidad de decisiones,
elecciones, metas… que uno asume en su día a día. Este ejercicio aumenta la
conciencia sobre el nivel de autodeterminación y sirve para identificar áreas
de mejora. Aprender y conocer mejor la vida de uno mismo es una parte
importante de la autodeterminación.
Y, ¿cómo
podemos guiar esta reflexión?
1) Lee las
afirmaciones siguientes y piensa si describen, o no, tu vida actual. Pon la
marca V (verdadera) en aquellas que describan tu vida, y la marca F (falsa) en
las que no lo hagan.
- Yo decido dónde
vivir
- Yo decido quién
puede venir a mi casa
- Yo escojo mis
propios amigos
- En mi tiempo libre,
hago actividades que me gustan
- En mi casa, yo
decido cómo tener mi habitación (qué objetos tener, cómo decorarla…)
- Puedo estar solo
sin que nadie me moleste (hablando por teléfono, escuchando música…)
- Yo decido si
tener novio/a o no
- Las personas que me
rodean respetan mis decisiones y elecciones
- Si quiero ir a
algún sitio, puedo hacerlo (utilizo medios de transporte, se cómo llegar a
diferentes lugares, tengo personas que me ayudan…)
- Cuando quiero o
necesito algo, puedo explicárselo a los demás
- Se cuando alguien
me está molestando, insultando o tratando mal
- Se defenderme
cuando creo que no se respetan mis derechos
- En mi vida, elijo
metas y objetivos que quiero conseguir
- Cuando voy al
médico, o tomo medicación, me explican qué me pasa
- Tengo dinero propio
(porque trabajo o porque me dan una paga)
- Yo decido cómo
gastar mi dinero
- Me siento
responsable de mi dinero
- Yo he decidido si
quiero trabajar o no
- He elegido el tipo
de trabajo que quiero hacer
- Las personas que me
rodean me aceptan cómo soy
- Me gusta hacer
cosas solo (asearme, vestirme, hacerme la comida, ir a los sitios…)
- Cuando algo me sale
mal, intento ver en qué he fallado
- Me siento bien
cuando tengo éxito en las cosas que hago (cuando apruebo un examen, cuando me
felicitan por mi trabajo…)
- Conozco qué cosas
se me dan bien
- A veces, explico a
los demás mi discapacidad para que me entiendan mejor
- Sé qué significa
“tener una discapacidad”, y lo puedo explicar con mis propias palabras
- Intento resolver
por mí mismo los problemas que tengo en el día a día (aunque pido ayuda si lo
necesito)
- La mayor parte del
tiempo tengo que obedecer a mis padres, profesores, o jefes en las
actividades que hago
- Me gusta probar
cosas nuevas (actividades de ocio que no he hecho nunca, conocer gente,
visitar nuevos lugares…)
- Sé qué cosas no
puedo hacer o conseguir (por ejemplo, conducir, ser futbolista…)
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2) Ahora,
lee las frases que has marcado como falsas, y pon una marca en las que hablen
de cosas importantes para ti. Tienes que decidir si quieres cambiar ese aspecto
(Por ejemplo, si no tienes tu dinero propio pero te gustaría, coloca una marca.
Si no tienes dinero propio pero te parece que no es importante, sigue leyendo).
3) ¿Tienes
claro qué cosas te gustaría cambiar? Habla con tus compañeros y con la persona
que te está apoyando sobre algunas cosas de tu vida que te gustaría cambiar.
Escribe algún objetivo importante y… ¡manos a la obra!
NOTA: Se puede adaptar este ejercicio al nivel de comprensión de la persona
con discapacidad. Se pueden utilizar fotografías, pictogramas, pegatinas para
marcar V o F… Además, se pueden eliminar aquellos ítems que no se consideren
adecuados. Otra posible aplicación de este tipo de ejercicios es que, por
ejemplo, lo completen los padres de la persona con discapacidad y realizar
comparaciones entre cómo ve ésta su vida y cómo la ven su familia). En la página slideshare, en mi perfil, se puede encontrar y descargar este mismo ejercicio en un documento PDF, por si interesa trabajarlo... Si te interesa, también puedes escribirme a aarellanotorres@gmail.com para que te lo envíe
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